Ya casi llegaban a la casa del malvado, Josesito se sintió perdido, sin embargo no dejaba de rezar. De repente, en el cielo se abrió una nube, Josesito la miró perplejo. De la nube emergió una paloma blanca, era la paloma mas hermosa que Josesito pudo ver en su corta vida.
La paloma volaba rápidamente hasta alcanzar una distancia prudente entre ella, el malvado hombre y el niño asustado.
La paloma ondeo sus alas y lanzo con ellas finos hilos blancos que se iban apoderando del hombre malvado sin que este pudiera soltarse. El hombre no lo podía creer, quería moverse, pero esos hilos se lo impedían.
El malvado se vio a si mismo levantado por los aires. Josesito se quedo paralizado por la emoción. Así era Dios? como una paloma blanca, brillante, absolutamente divina?
El malvado gritaba, pataleaba, movía los brazos intentando escapar, pero esos hilos eran demasiado fuertes.
Una voz suave, muy diferente a las voces que Josesito conocía, le ordenó al niño que se fuera, que al final del camino encontraría a su madre, quien estaba buscándolo hace rato. Que no se preocupara mas, todo estaría bien.
Josesito se arrodillo, le dio las gracias a Dios, le pregunto que iba a pasar con el hombre malvado.
La voz le respondió, no te preocupes hijo, todo estará bien. Vete en paz y por favor no vuelvas a desobedecer a tu mamá.
El final de esta historia mañana.....
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