El primer mandamiento de la ley de Dios es amar a Dios por sobre todas las cosas, recibir el amor de Dios y corresponder a ese amor, significa que ese puro, incondicional e irrompible sentimiento de amor que Dios nos da, debe estar por encima de todas las demás cosas, personas o animales en el universo entero.
Y es porque gracias a Dios y a su inmenso amor, nosotros podemos disfrutar de la vida en esta tierra. Dios es amor, Dios es padre, Dios es hijo y Dios es espíritu santo. El espíritu Santo es el señor y dador de vida, por lo tanto, si tenemos vida es porque Dios existe dentro de nuestro corazón.
Por esa razón, Dios, nuestro padre y creador, el dueño absoluto del universo, tiene la capacidad de estar en todas partes y acompañarnos siempre, porque su presencia se encuentra dentro del alma de cada ser vivo.
Amar a Dios por sobre todas las cosas significa que no hay nada ni nadie en este mundo que merezca mas nuestro amor que nuestro padre celestial, nuestro creador.
El amor de Dios, es el mas enorme, puro e incondicional sentimiento que jamas encontraremos en nadie mas. Y no importa lo que seamos, o como seamos, nuestro adorado padre, jamás dejara de amarnos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
SEND YOUR COMMENTS