Madres, padres,
hermanas, hermanos, sobrinas, sobrinos, familias enteras, cuando nos tomaremos
el tiempo para darles a los seres que Dios nos dio para amar en este mundo la
importancia se merecen.
Cuando vamos a
entender que el tiempo que se va ya no regresa, que la vida se acaba y que
después de la muerte ya no hay mañana.
Cuando vamos a
dejar de lado nuestras múltiples ocupaciones, nuestro trabajo tan importante,
nuestro deseo de hacer dinero, las preocupaciones por las deudas y otras muchas
cosas que no son relevantes en realidad y tomaremos un minuto para decir, te
amo.
Un minuto de las 24 horas del día para abrazar a
nuestra madre, a nuestro padre, a nuestro hermano o cualquier otro familiar.
Cuanto se
demora decir te amo, te quiero o te necesito.
Cuando vamos a
tener tiempo para cerrar los ojos y agradecer a Dios por todo lo maravilloso
que nos regala cada día, todos los días.
Por favor ya no
demores más, perdona, ama, ríe, llora, agradece, pide perdón y, sobre todo, ama
a Dios.
Si lo intentas, sabrás que no es difícil, es solo
un pequeño cambio de actitud.
Quizá mañana,
cuando pierdas a alguien que tú amas y te des cuenta de que el tiempo se
terminó, lo único que te quedará es lamentarte y sentirse triste por no haber
dicho lo que querías decir y, sobre todo, lo que los demás necesitaban escuchar
de ti.
El coronavirus
unió familias y nos concientizó de lo importante que es tener vivo al ser
que amamos y decirle te amo antes de perderlo. Lamentablemente no todos
obtuvimos esa concientización.
Gracias Diosito por esta oportunidad 🙏😇
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
SEND YOUR COMMENTS